En su presentación en Madrid de los nuevos Surface 2 y Windows 8.1, Microsoft ha confirmado que Windows XP dejará de tener soporte por parte de la compañía a partir del próximo 8 de abril.
Eso significa que no habrá parches de seguridad ni ningún tipo de actualización, lo que supone que el sistema operativo, aunque seguirá funcionando, se volverá gradualmente vulnerable a ataques. La noticia no es baladí ya que Microsoft calcula que el 30 por ciento de los ordenadores en España siguen utilizando este sistema operativo que fue lanzado hace 13 años.
Debe estar conectado para enviar un comentario.